Al ver que perdía el control sobre nosotros
quise reducir y meter primera
pero en vez de eso me confundí
y metí tercera.
Y claro, me di la hostia de mi vida.
Y así,
una y mil veces.
Porque ya se sabe
que el hombre es el único animal
que tropieza dos veces
con la misma piedra.
Y yo no iba a ser diferente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario